ESTRES
Muchos de nosotros nos vemos sometidos a las exigencias y presiones de la vida tales como: problemas en el trabajo,
divorcio, problemas económicos, entre otros.
Cuando la tensión que ejerce la situación por las que estamos atravesando supera
los recursos con los que contamos, sentimos temor a perder el control y como
resultado entramos en un estado de fatiga física y emocional. Ese estado es lo que conocemos como estrés.
Cuando una persona se encuentra estresada puede experimentar varios síntomas tales como: sentirse desesperado, problemas para concentrarse, dolor de cabeza, falta
de energía, cansancio, problemas para dormir, diarrea, dolor estomacal, cuello
o mandíbula rígida, pérdida o aumento de apetito, problemas en la sexualidad y un
pensamiento casi obsesivo sobre sus problemas.
Si el estrés no es manejado de una forma eficiente puede ser la causa de
muchas de las condiciones cardíacas, problemas gástricos, musculares, entre
otros. Es
por esto que es necesario aprender a manejar los síntomas del estrés. Para esto te presento algunas
recomendaciones que te pueden ayudar:
·
Se optimista. Una de las razones por la que nos estresamos
es que pensamos y sentimos que no somos capaces de resolver esa situación por
la que estamos atravesando. Al ver las
consecuencias de nuestros fracasos nos asustamos porque pensamos que es lo peor
que nos puede pasar. Esto hace que nos
paralicemos y surjan todos los síntomas desagradables que hemos mencionado. En cambio,
cuando somos optimistas transformamos esa energía en un impulso, nos sentimos
preparados para enfrentar la situación y luchamos para vencerla. De esta forma el
estrés que sentimos, se convierte en una herramienta útil para lograr nuestras
metas.
· Buscar la excelencia no
la perfección. No todo va a salir perfecto o no siempre vamos a tener el
control de la situación. El tener esa
falsa expectativa nos provocará sentirnos desesperados. Para que esto no
suceda, cambiemos la perfección irreal por la excelencia. Esto significa que hacemos las cosas dando lo
mejor de nosotros, sin importar cual pueda ser el resultado. Al final nos
sentiremos orgullosos por nuestro esfuerzo.
· Planifícate. En ocasiones, cuando estamos estresados es
porque tenemos muchas cosas que hacer o el problema lo percibimos tan grande
que no sabemos por dónde empezar. Para esto, la planificación te puede
ayudar. Agenda cada situación que debas
de trabajar y enfoca toda tu energía en la labor que te toca hacer hoy. Olvídate
de mañana, ya está agendada. Al hacer
esto, no diluyes tu energía. Si el
problema es muy grande, subdivídelos y trabaja un problema a la vez empezando
por el problema más pequeño hasta llegar al problema más grande.
· Saca tiempo para
disfrutar y para relajarte. Los síntomas del estrés pueden ser controlados, si
la persona busca aprender a relajarse. Para esto pueden intentar hacer
ejercicio, escuchar música, hacer ejercicios de relajación muscular y
reparación, meditar, entre otros. Además, el tiempo de ocio es muy necesario. Compartir con tus amigos, ver una película
graciosa en el cine, o ir a la playa son activiades relajantes y que te haran sentir mejor.
En otras palabras, disfrutar de la vida.
En ocasiones ese tiempo no está disponible. Pero si queremos manejar el estrés es
necesario hacer un espacio y aprender a relajarte.
Sentir estrés por si mismo, no es algo dañino,
esto es parte de nuestra vida. Si lo enfrentamos con una mentalidad negativa,
este puede ser nocivo para nuestra salud emocional y física; pero si, por el
contrario, aprendemos a manejarlo con una mentalidad optimista, si nos
organizamos y si aprendemos a relajarnos, el estrés puede ser útil para lograr
nuestras metas.
Roberto Irizarry Rivera Psy D.
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Reviewed by Pregúntale al psicólogo
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17:28
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